> Gaddafi, Libia y el Dinar de Oro. Causas de Guerra

[Ator]

Uno de los grandes engaños sobre las guerras actuales, y probablemente sobre todas las de la historia, es la verdadera causa que las origina.

Tortura a civiles por parte de un dictador, atentados con aviones comerciales que burlan el más sofisticado sistema de defensa, maltrato a la mujer, son algunas de las razones que, siendo detestables, han facilitado la invasión de una nación por parte de otras con absoluta justificación mientras otros países realizando prácticas tan destestables o más, quedaban impunes.

En su día (2 de agosto de 1.990) Saddam Hussein invadió Kuwait, sin que ello supusiera un establecimiento permanente por parte de la OTAN en el territorio de Irak.

Pero diez años después, en Octubre de 2000, Saddam Hussein anunció su intención de exportar petróleo en euros, en lugar de los dólares con los que los países de la OPEP lo habían comercializado hasta entonces. La hegemonía del dólar como única moneda por la que se cambiaban las materias primas en los mercados mundiales podía verse amenazada si otros países seguían el mismo camino, lo cual, a su vez echaba por tierra la opción de imprimir más billetes sin subyacente para obtener más materias primas llegado el caso. Esto convierte en el país más poderoso del mundo a quien tenga el poder de realizarlo. Hoy en día sólo Estados Unidos.

Todavía resuenan las quejas que, tras su dimisión tiempo después de haber creído a pies juntillas la información que la Agencia de Inteligencia Americana le proporcionó sobre teóricas armas de destrucción masiva irakíes, el entonces Secretario de Estado Colin Powell hacía llegar a los medios sorprendido cuando el mismo 11 de septiembre de 2.001, inmediatamente tras conocerse los atentados George Bush reunió a su gabinete y a voz en grito indicó que había que invadir Irak, mientras el problema teóricamente se había originado en Afganistán (Bin Laden).

Ahora tenemos un sátrapa consentido internacionalmente en el poder -Gaddafi-, al que también se le adjudicaron atentados aéreos lustros atrás sin que ello supusiera invasión alguna, que de pronto se reviste en la figura demoníaca contra los Derechos Fundamentales.

¿Y qué tenemos también de lo que se nos informa menos, oh casualidad? Pues tenemos efectivamente, Oh casualidad, la intención por parte del dictador libio de introducir el "dinar de oro" como moneda que rivalizara contra el Euro y el Dólar dentro de todos los países del área musulmana.

Ni que decir tiene lo que la circulación de una nueva moneda en los países árabes que con el tiempo podría competir no ya sólo con el Euro, sino también con el intocable Dólar, supondría a efectos por ejemplo de exportación de petróleo.

Gaddafi tiene los días contados. Así como nunca se encontró el cuerpo de Bin Laden, que olía a muerto desde que en el año 2001 -según los servicios de inteligencia muy enfermo de cáncer pese a los absurdos videos posteriores en los que individuos sin siquiera parecido físico alguno se hacían pasar por él-, terminara su último trabajo para la agencia de inteligencia que le había tenido a sueldo, y que en su día inundó Afganistán de armas de la OTAN para resistir a las tropas rusas, a Gaddafi seguramente le sucederá como a Saddam Hussein, ejecución pública mostrando lo más denigrante del ser humano.

Y pagaremos entrada para verlo, seguro.